El miedo de los gatos a los pepinos ha generado millones de vistas en redes sociales, donde personas graban a sus felinos brincando o huyendo al encontrar este vegetal detrás de ellos. 

Y aunque parece un acto divertido, tiene detrás un trasfondo serio relacionado con el comportamiento felino y su estado emocional. ¿Sabes de dónde viene este miedo? 

Los gatos son animales que viven en alerta constante debido a su instinto de supervivencia. 

Para ellos, cualquier objeto nuevo y desconocido puede representar una amenaza, especialmente si aparece de manera inesperada en su entorno inmediato, como ocurre con los pepinos colocados detrás mientras comen. 

Esta reacción no significa que tengan un miedo específico al vegetal, sino que se activa un reflejo de sobresalto y huida ante lo que perciben como un peligro potencial.

Aunque no existe un estudio exclusivo sobre el miedo de los gatos a los pepinos, especialistas en comportamiento felino explican que su reacción es parte de su instinto de defensa. 

Según la American Association of Professional Cat Trainers, cuando un gato ve un objeto que no estaba allí antes, especialmente mientras come o está distraído, su cerebro procesa ese cambio repentino como una posible amenaza.

El color y la forma alargada de los pepinos pueden ser asociados de manera instintiva con serpientes, animales que representan peligro para los felinos en su estado salvaje. 

El Dr. Roger Mugford, especialista en comportamiento animal, afirma que no es un miedo al pepino como tal, sino al sobresalto que provoca ver un objeto inesperado en su zona segura. 

La misma reacción ocurriría con otros objetos si se colocaran sin que el gato los notara.

Muchos veterinarios y organizaciones como la ASPCA (American Society for the Prevention of Cruelty to Animals) han alertado sobre los riesgos de estas prácticas virales. 

Aunque los videos de gatos saltando por miedo a los pepinos parecen divertidos, este tipo de sustos generan estrés felino, un problema que afecta su salud emocional y física.

Los riesgos de asustar a los gatos con pepinos pueden desencadenar:

• Trastornos de ansiedad que alteran su conducta
• Daños físicos si al huir se golpean o caen mal
• Estrés crónico que debilita su sistema inmune
• Desarrollo de fobias a espacios específicos de la casa

El sobresalto provoca liberación de cortisol y adrenalina, hormonas que aumentan la frecuencia cardiaca y respiratoria. Esto es especialmente peligroso para gatos de edad avanzada o con problemas cardíacos, pues podría desencadenar complicaciones graves.

Los especialistas en comportamiento felino recomiendan evitar cualquier broma que implique sobresaltarlos. Asustarlos con pepinos puede parecer inofensivo, pero altera su percepción de seguridad dentro de su hogar, generando desconfianza hacia los espacios donde antes se sentían tranquilos.

En lugar de exponerlos a situaciones estresantes, los veterinarios sugieren actividades de enriquecimiento ambiental como:

• Instalar rascadores y estantes para trepar
• Proveer juguetes interactivos para su estimulación mental
• Generar rutinas estables de alimentación y descanso
• Evitar cambios drásticos en su entorno sin un proceso de adaptación