Los ataques de cocodrilo en la zona sur de Tamaulipas han ido en aumento, pues antes del 2018 apenas se registraban uno o dos, pero después del 2020 la cifra ha llegado hasta siete por año en promedio. De acuerdo a las estadísticas de la asociación “SOS Cocodrilo”, desde el 2008 en todo el estado de Tamaulipas se han generado más de 44 interacciones entre pobladores y los saurios, con un total de nueve defunciones, la mayor parte en Tampico, Madero y Altamira. Las corporaciones de Bomberos en la localidad, coinciden en que los incidentes han ido incrementando, sobre todo en la laguna del Carpintero donde los ataques ocurren debido a que las personas ingresan al agua, es decir, no hay una sola agresión cuando estos animales salen de su hábitat.

De acuerdo a las estadísticas de SOS Cocodrilo, en el 2020 hubo siete ataques, mientras que en el 2021 fueron seis y en lo que va del 2022 ocurrieron tres con un deceso, es decir desde hace tres años el número se ha mantenido. El comandante de Bomberos de Tampico, Juan García Hernández, también reconoció que en los últimos años se ha registrado un mayor número de ataques, pues las personas no están respetando las indicaciones y señalamientos que han puesto las autoridades en los cuerpos de agua.

En lo que respecta a la ciudad este año se han registrado dos incidentes, uno en mayo, donde por fortuna pudieron sacar con vida al hombre que se aventó a la laguna, y el que se registró este jueves.

“Se ha notado un incremento, pero no podemos establecer por qué, las autoridades han encaminado esfuerzos para colocar señalamientos y alertar de no ingresar a las lagunas que tienen cocodrilos pero la gente no ha hecho caso, algunos que se meten han sido indigentes, pero también hay personas que no padecen de sus facultades mentales que también se meten, en el caso de la laguna del Carpintero”.

Tan solo en el municipio de Tampico en el 2020 fueron 60 los cocodrilos captados paseando por las calles de la ciudad, la mayoría recorriendo las colonias aledañas a la laguna del Carpintero como la Barandillas, Del Pueblo, Obrera y sobre el Bulevar Perimetral. En el 2021 se salieron 50 y en lo que va del 2022 van 27, es decir la tendencia se mantiene, indicó el comandante.

Señaló que, si bien los ataques han ido en aumento, las cifras todavía no se pueden considerar alarmantes, pues se debe de tomar en cuenta que se han registrado cuando las personas ingresan a la laguna y no cuando los animales salen del agua. “Cuando ellos salen del agua tienen un comportamiento diferente, tienden a huir, pero cuando están en el agua atacan, pese a ello la recomendación es no acercarse bajo ninguna circunstancia”.

Muy pocos reubicados Hasta la fecha solo cuatro cocodrilos del Carpintero han sido reubicados a cuerpos de agua de Altamira y el último a una unidad de Manejo Ambiental en Villas de Casas; y es que solo hay permiso para mover a los que se salen de su hábitat o atacan.

Daniel Gómez, subdelegado de la Procuraduría Federal de Protección al Ambiente (Profepa), indicó que se ha hecho movilización de los saurios de gran tamaño, aunque la mayor parte de las agresiones se dan porque las personas ingresan a las lagunas y no porque los saurios se salen. Por ahora han sido cuatro los reubicados, pero solo porque se salen de la laguna o han atacado a alguien, que es para lo que tienen autorización por parte de la Secretaría de Medio Ambiente y Recursos Naturales (Semarnat). 

Mario Fernández, inspector de la Profepa, señaló que no se puede hacer una reubicación masiva de estos animales, pues sería entorpecer la cadena alimenticia. “Están dentro de su hábitat, es su hábitat natural, es entorpecer su cadena alimenticia y nosotros no podemos intervenir a la naturaleza en su agravio”. Por ahora el cocodrilo que mató a un joven este jueves, fue llevado al Cuartel de Bomberos de Tampico, donde va a permanecer hasta que las autoridades deliberen a qué lugar lo pueden reubicar. Ahí se le realizará una radiografía para saber si en sus entrañas hay restos humanos. Cabe señalar que los investigadores de SOS Cocodrilo, hicieron un censo de los animales en la laguna del Carpintero, ellos habían recomendado reubicar a por lo menos 10, que eran los de mayor tamaño, pues aseguraron que eran los agresivos y territoriales.

Sin embargo César Cedillo, quien lideró el estudio, indicó que la movilización no es tan sencilla, pues se requiere de hacer un papeleo y autorización por parte de las autoridades federales. En la laguna del Carpintero se calcula que habitan 90 cocodrilos, alrededor de este cuerpo de agua hay por lo menos 20 colonias, sin embargo la Del Pueblo, Barandillas, Zona Centro, Obrera y Mainero, son las que más avistamientos tienen de cocodrilos en sus calles. Por su parte el edil Juan Pizaña Martínez, comisionado de Ecología de Tampico, informó que la reubicación es un tema pendiente no solo de la laguna ubicada en el centro de la ciudad, también de los cuerpos de agua de la zona sur. Hace más de un año, luego de interacciones entre humanos y saurios que han finalizado de manera trágica, los expertos hicieron un censo y determinaron que era viable reubicar a los cocodrilos que más tienden a salir. “Es algo que depende de la voluntad, pero hasta ahora no se ha podido hacer nada sobre el proyecto de reubicación, no se le ha puesto importancia y de alguna forma está relacionado a la cuestión económica”, declaró.