Tan altos como una ser humano y con una visión de 360 grados, a estos robots policía que patrullan el aeropuerto de Singapur no se les escapa una y están causando sensación.

Los robots autónomos poco a poco están siendo incorporados en la vida diaria de las personas. Ya son más que conocidos en algunos restaurantes en los que te sirven la comida o incluso son perfectos para detectar bombas en zonas peligrosas.

Ahora la novedad se centra en su uso como policías y ya están patrullando el aeropuerto de Changi, en Singapur, tras más de 5 años de pruebas. Están destinados a «proyectar presencia policial adicional» y servir como «ojos en el terreno» adicionales, según explican, que los describen como la última incorporación a su «arsenal tecnológico».

Tal y como indican los propios agentes, durante cualquier problema en el aeropuerto los robots pueden establecer zonas seguras y advertir a las personas usando sus luces intermitentes, sirenas y sus voces mientras esperan que lleguen los policías humanos.

demás, las propias personas pueden comunicarse directamente con el cuerpo de seguridad presionando un botón que incorporan. 

Una extensión del propio cuerpo de Policía

«La integración de la robótica mejora la eficiencia operativa y las capacidades de nuestros oficiales de primera línea, lo que les permite ser más efectivos en sus funciones», dijo el superintendente y jefe de operaciones Lim Ke Wei de la policía del aeropuerto.