Uno de los iconos femeninos de la producción de teatro en México, Tina Galindo, quien estuvo al frente del Teatro de los Insurgentes, falleció a los 78 años de edad la noche del lunes 29 de enero, debido a un paro respiratorio a causa de las secuelas por covid-19. Sus restos fueron cremados y el gremio teatral espera concretar un homenaje en su honor.

Su hermana, María Elena Galindo, enfatizó que se fue tranquila, en su casa, y en compañía de sus seres queridos.

Le dio covid hace un año y las secuelas del covid le afectaron los pulmones. El pulmón derecho ayer (lunes) ya no funcionaba y eso hizo que su corazón estuviera más agitado todo el tiempo. De repente se fue. Se le fue un coágulo al pulmón y broncoaspiró. Eso fue lo que le pasó.

Se fue tranquila, con una sonrisa en la boca. Se fue maravillosamente bien. Fue una mujer, no porque sea mi hermana, que abrió puertas, que ayudó a muchísima gente. Fue la más generosa en todo sentido”, expresó María Elena Galindo.

Su hermana destacó que le gustaría que la recordaran como una gran mujer.

“Fue una gran empresaria que ayudó a muchos actores desde el principio y a quienes veía que no iban a funcionar, los orientaba a otra carrera. Tenía un carácter muy fuerte, porque no quería que la gente realmente viera lo que tenía dentro, que era muy sensible”, dijo.

María Elena precisó que fue ella quien le prometió que no la llevaría a ningún hospital, además de que todo fue muy rápido.

Estuvo perfecta en su casa. Todo el covid lo pasó bien y la verdad tuvo un final muy bueno. Ella estaba bien y a las 23 horas o 22:45 horas (del lunes) empezó con esa cosa y no sabíamos qué era. Uno de los enfermeros vio que tenía un coágulo y se le fue al pulmón y broncoaspiró. Fue inesperado”, reveló.

Con más de cinco décadas de trayectoria, Tina Galindo Ochoa inició su carrera como productora teatral con la obra El efecto de los rayas gamma sobre las caléndulas, en 1972.

También fue productora de televisión y representante artística. Desde 1982 fue manager de la cantante Daniela Romo, con quien se volvió inseparable. Para 1994 fue la directora de los Televiteatros y Promovisión Mexicana, empresas filiales de Televisa. Más tarde, en 1996, fue directora de Melody y vicepresidenta de representaciones artísticas y musicales para Grupo Televisa.

Produjo la obra La libélula, junto a Héctor Suárez (qepd) y desde 1999 dirigió el Teatro de los Insurgentes, que el año pasado cumplió 70 años de haber sido inaugurado

En éste produjo musicales, junto al productor Claudio Carrera, como Cabaret, con Itatí Canoral y Kika Édgar; Víctor Victoria, con Daniela Romo; El buen canario, con Diego Luna e Irene Azuela, bajo la dirección de John Malkovich;  Una Eva y dos patanes, con Eugenio Derbez; La novicia rebelde, con Bianca Marroquín; Todo sobre mi madre, con Margarita Gralia; Juegos siniestros, con José María Yazpik y Daniel Giménez Cacho; Nadando con tiburones, con Demián Bichir y Ana de la Reguera; y Amor, dolor ¡y lo que traía puesto!, con Silvia Pinal.

También, El curioso incidente del perro a media noche, con Luis Gerardo Méndez y Cecilia Suárez; Annie, con Mariana Treviño; El hombre de La Mancha, con Benny Ibarra; Los locos Addams, con Susana Zabaleta y Jesús Ochoa; Privacidad, con Diego Luna; Hello Dolly! con Daniela Romo; Sugar, con Ariel Miramontes y Cassandra Sánchez Navarro; la obra en pandemia Blindness, con Marina de Tavira; Network, con Daniel Giménez Cacho y Mamma Mia!, la más reciente con Lisset.

Incluso el lunes pasado se anunció que Cabaret volverá al recinto, luego de dos décadas.

El GREMIO, de luto

Tina Galindo abrió brecha en el teatro mexicano como una mujer productora en un gremio principalmente de hombres.

Fue de las impulsoras, al igual que Silvia Pinal y Fela Fábregas (qepd), de historias y montajes de una calidad impecable, con elencos memorables, y que hizo del Teatro de los Insurgentes, con sus más de siete décadas, una de las catedrales de los recintos escénicos de la Ciudad de México. Así lo dijeron a Excélsior los productores.

Juan Torres señaló que su pérdida es enorme para el teatro en México es uno de sus pilares.

Tina Galindo fue empresaria, una gran productora de teatro, muy exitosa. Fue pionera y vanguardista. Cuando estaban concesionados tantos teatros  y se produjeron tantas obras, la directora de los Televiteatros era Tina Galindo. Fue productora desde muy joven. Cuando empezaron a nacer el Teatro I y 2, antes Telmex, que fueron reconstruidos después del sismo de 1985, eran los Teatros Alameda y la primera en estar al frente fue Tina Galindo.

Una aportación muy importante es esta etapa en donde tanto brillo ha tenido el Teatro de los Insurgentes. Fue una productora que amó el teatro, lo produjo, dio mucho empleo, le dedicó su vida.

Le agradezco lo que hizo por los productores, porque es nuestra presidenta de la Sociedad Mexicana de Productores de Teatro (Teatromex) y se consiguieron muchos logros en su gestión. Siempre estuvo al frente de lo que se necesitaba. Así que en todo lo que hagamos en el teatro hoy estará Tina Galindo. No podemos hablar de lo que pasa en el teatro en México actual, sin su aportación”, expresó Torres.

En ello coincidieron sus colegas. Rubén Lara fue amigo de Galindo desde hace más de 40 años y la última obra que hicieron juntos fue El marido perfecto: “Deja un legado enorme. Si analizamos toda su vida, es impresionante todo lo que hizo. Va a ser una pérdida irreparable. Imposible que alguien pueda llegar a llenar sus zapatos. Fue una mujer muy disciplinada, entrañable, que siempre tuvo para la gente palabras de aliento. Me enseñó a hacer las cosas bien, tratar bien los actores, porque era lo más importante”.

Morris Gilbert destacó que no sólo era una enamorada del teatro, sino que lo hacía muy bien.

Tuvimos una larga relación, siempre fuimos muy amigos y buenos colegas. Es un duelo para el teatro. Siento una enorme nostalgia. Uno se acostumbra a la gente. Ella siempre estaba ahí y sabías que contabas con ella. Muchas tardes, los domingos, nos sentábamos a platicar. Ahora ya no está.

Lo que hay que hacer es dedicarle homenaje a su memoria. Cuando hice en el Insurgentes El hombre de La Mancha me dijo: lo lograste, tu sueño imposible, se volvió posible’. Eso no se olvida”, acotó.

Alex Gou enfatizó que en Tina Galindo, Silvia Pinal y Fela Fábregas (qepd) son las tres precursoras femeninas del teatro en México: “Tina fue una gran amiga y de mi padre. Nos adoptó a Sergio Gabriel, Claudio Carrera y a mí como sus pupilos. Era muy divertida y muy dura para los negocios. Todo el mundo la respetábamos. Hizo todo lo que fue el Teatro Blanquita, con Daniela Romo y todo su historial en el Insurgentes. La vamos a recordar con mucho cariño y respetar siempre”.

Guillermo Wiechers compartió que su relación con Galindo se estrechó desde 2019 a la fecha, no sólo por su afición a los postres, sino por la intención que ella tenía de dejarlo como sucesor de Teatromex: “Fue una mujer que partió plaza en el teatro de este país. Antes del Teatro de los Insurgentes, impulsó el Teatro de las Américas; hizo historia como asistente de dirección de la maestra Nancy Cárdenas con montajes tan atrevidos y adelantados a su época como Los muchachos de la banda, que fue un escándalo”, dijo.

Antonio Calvo recalcó que gracias a Tina el Teatro de los Insurgentes es uno de los más importantes en México: “Nos dejó como herencia ese teatrazo, donde hacen esas superproducciones. Hizo una labor increíble”.